¿Te sangran las encías? ¿Están inflamadas o con un color rojo brillante? ¿Tienes recesiones en tus encías que hacen que se vean las raíces de tus dientes? ¿Movilidad dental? ¿Mal aliento? Si te sientes identificado con algunos de estos signos, llámanos.
La periodoncia es la rama de la odontología encargada prevenir, diagnosticar y tratar los tejidos que rodean a los dientes: encías, ligamento periodontal, hueso alveolar.
La causa principal es la acumulación de placa bacteriana y sarro, pero existen otros factores predisponentes como la diabetes, el tabaco, malposición dental, estrés o cambios hormonales como el embarazo.
La GINGIVITIS es la primera fase de la enfermedad periodontal en la que los signos más comunes son la inflamación, enrojecimiento y sangrado de las encías.
Es importante el tratamiento precoz de la misma para evitar su evolución a una PERIODONTITIS.
La PERIODONTITIS es una patología grave en la que la infección no sólo afecta a la encía sino también a la pérdida del hueso alveolar. Los signos más comunes son el mal aliento, retracción de encías, sensibilidad dental, abscesos, y movilidad dental. Si no la tratamos a tiempo puede provocar la pérdida de algún diente.
El diagnóstico debe hacerlo el especialista a través de unas radiografías y un estudio periodontal completo en el que se determine el grado de afectación de los tejidos y se realice
el tratamiento más indicado en cada caso.
El objetivo del tratamiento periodontal es restablecer la salud de los tejidos que rodean al diente para evitar la pérdida de los mismos. La pérdida de piezas dentales da lugar a problemas masticatorios, de habla, estéticos y psicológicos.